En este año Xacobeo 2021 queremos dedicar esta Pieza del mes a una pequeña joya encontrada en el corazón y germen de la ciudad de Ourense, As Burgas. Al lado de estas surgencias termales se encuentra la Casa dos Fornos, excavada por el arqueólogo Celso Rodríguez Cao en 2005, donde descubrió que su planimetría se corresponde con la de un edificio terapéutico y religioso que aprovechaba el manantial termal por las calidades minerales y caloríferas de estas aguas.

En la época medieval y también en la moderna, los peregrinos en ruta a Santiago o ya de vuelta hacia sus lugares de origen paraban a descansar en los balnearios de As Burgas para, despues de visitar en la Catedral la Capilla del santo Cristo, continuar su viaje. Entre las rutas de peregrinación que pasan por nuestra ciudad destacan las de los caminos del sudeste ourensano que, procedentes de Braganza y Vinhais, pasaban por Vilardevós o por Chaves hasta Verín, y desde allí, yendo por Laza, A Alberguería o por Xinzo de Limia, llegaban a Ourense. Otra ruta sería la que venía desde Braga y pasaba por Bande y Celanova de camino a Ourense. A partir del siglo XVI van a ser cada vez más numerosas las alusiones a las fuentes de As Burgas por parte de cronistas, viajeros y peregrinos que llegan a nuestra ciudad.

En la excavación de la Casa dos Fornos apareció esta pieza de azabache que representa un Santiago Peregrino. Su reducido tamaño y el hecho de tener una perforación transversal a la altura de la cintura, indican que muy probablemente se trate de una cuenta que iría ensartada en un rosario elaborado por los artesanos del azabache, que a partir del siglo XIII se establecen como gremio en la compostelana calle de la Acibechería. En la Edad Media va a florecer esta profesión como respuesta a las peregrinaciones fabricando objetos con este lujoso y escaso material en los que se conjuga devoción y superstición.